La ubicaciĂłn es perfecta, estĂĄ en una zona preciosa y tranquila.
Trato directo con la propietaria, muy maja y de buen trato.
Pongo tres pegas:
1- Falta de limpieza.
La dueña me dijo que los anteriores inquilinos se habĂan ido pocas horas antes de nuestra llegada y que lo sentĂa si no habĂa quedado todo correcto.
Siento que fuera asĂ y que se diera un palizĂłn, pero no es mi culpa.
No veo justo pagar lo que he pagado para encontrarme las cosas asĂ. Tuve que limpiar el baño yo con lejĂa, tuve que limpiar tambiĂ©n la cocina porque me daba mal rollo...
HabĂa restos de champĂș, jabĂłn o lo que fuera en la bañera, restos de pelos en el desagĂŒe, manchas en la pica del baño, los grifos con marcas...
En la cocina, el lavavajillas olĂa raro (ni lo usamos), el microondas con suciedad, sobre todo en los mandos de fuera, la pica mal limpiada...
Detalles que no gustan.
2- Los colchones son muy malos. Muy blandos. Tienen mucho uso.
3- No cuidan los detalles.
La ropa de las habitaciones, såbanas, colchas, se notan muy usadas, las colchas con muy viejas, incluso con zonas desteñidas.
Parecen sacadas de casa de mi abuela.
No gusta ver como algunas fundas de almohada son mas pequeñas que la propia almohada.
Las toallas de baño igual, sĂșper viejas, como si fueran las que le han ido sobrando por casa, sin tener ningĂșn cuidado por ellas. Algunas con manchas del uso que ya no salen.
Es lo que digo, la casa es tremenda, pero no el interior, esos detalles...
He pagado mucho dinero por una semana y esperaba que fuera todo con una calidad mĂĄs alta.
No son detalles que valgan mucho dinero y creo que no cuesta mucho mantenerlos bien.
Que hemos disfrutado y nos ha gustado la estancia, pero nos ha decepcionado todo eso un poco (y dejado dolor de espalda).