Una muy agradable estancia en una casa muy bonita, de reciente construcción, decorada con gusto y perfectamente equipada.
Ubicada en un barrio tranquilo, a cinco minutos a pie del centro de La Turballe, veinte minutos en coche de Guerande, Le Croisic o Piriac.
Tanto como para una estancia de relax y calma en los alrededores, cómo para punto de partida de descubrimiento de Morbihan, es un gran acierto.