El piso está muy bien situado en Carballo, cerca de todo y con aparcamiento gratis muy cerca de la vivienda. Es enorme, con habitaciones muy amplias y muy tranquilo, se ha podido dormir perfectamente sin enterarse ni de vecinos ni del ruido de la calle. Por poner un único pero, dispone de muy poco menaje en la cocina, nosotros éramos 5 y para poder cocinar nos vimos un poco limitados.
Los propietarios Pilar y su esposo, encantadores y preocupados que no nos faltase de nada.